María está sentada con su amigo Francisco en un café en el centro de Barcelona.

   Son estudiantes de literatura en la universidad.

   Ella ve a su hermano que llega.

   M.: Hola, Juan, ¿qué haces tú por aquí?

   J.: Hola, María, voy a la biblioteca.

   M.: Párate un minuto. Te presento a mi nuevo amigo Francisco.

   J.: Hola, Francisco, ¿cómo estás?

   F.: Bien, ¿y tú?

   J.: Estoy bien también. ¿De dónde eres?

   F.: Soy Francés, de Paris.

   F.: De hecho, me llamo François. Pero en España es más fácil de usar Francisco.

   F.: Estoy estudiando con María.

   M.: ¿Quieres tomar algo, Juan?

   J.: Gracias. Pero estoy de prisa.

   J.: Me tengo que ir antes de que cierre la biblioteca.

   F.: Adiós.

   J.: Hasta luego.